Las presas Boquilla y Las Vírgenes del distrito de riego 005, con cabecera en Ciudad Delicias, alcanzaron niveles críticos de 15.8% y 11.7% respectivamente, al concluir el ciclo agrícola 2024. Otras presas en el estado, como El Tintero (10.6%) y Las Lajas (6.7%), también reportan almacenamientos mínimos.
Los productores agrícolas extrajeron más de 700 millones de metros cúbicos de ambas presas entre marzo y septiembre, superando lo autorizado por la Comisión Nacional del Agua (Conagua). La evaporación y la falta de lluvias por la sequía han dejado sin agua a los embalses, poniendo en riesgo el ciclo agrícola de 2025, confirmó Mario Mata Carrasco, director de la Junta Central de Agua y Saneamiento (JCAS).
Mata justificó que la sequía es la causa principal del bajo almacenamiento y desestimó la sobreexplotación por parte de los agricultores. Recordó que en años anteriores, ambas presas terminaron con reservas de 25% a 30%, y este año quedaron debajo de 20% debido al fenómeno de La Niña, advirtiendo que se necesitarán al menos dos años para su recuperación.
Al inicio del ciclo agrícola 2024, Las Vírgenes tenía 109.2 millones de metros cúbicos, pero ahora solo cuenta con 38.8 millones, con una extracción de 70.4 millones. En Boquilla, el almacenamiento bajó de 1,081.2 millones a 450.3 millones, tras un gasto de 630.9 millones.
Ante esta crisis, la gobernadora María Eugenia Campos Galvó anunció que el gobierno estatal deberá invertir mil millones de pesos en 2025 en programas de apoyo para 20,000 productores agrícolas afectados. Esta inversión, que representa un aumento significativo respecto a los 213 millones en 2023 y 588 millones en 2024, incluye tecnificación de riego, empleo temporal, adquisición de maquinaria y entrega de insumos agropecuarios.
El secretario de Desarrollo Rural, Mauro Parada Muñoz, anticipó la cancelación del plan de riego 2025, señalando que, aunque hubo lluvias este año, fueron inferiores al promedio y la sequía acumulada ha dificultado la recuperación de los cauces.
“Se quiere generar condiciones para que los agricultores puedan mantener sus actividades al menos latentes. No va a ser un año de alta productividad, pero se busca asegurar la supervivencia de cultivos perennes como árboles de nogal”, afirmó.
La inversión de 2025 busca mitigar los efectos de la sequía que impactarán negativamente productos esenciales como frijol, maíz y alfalfa. Arturo Zubía Fernández, diputado presidente de la Comisión del Agua del Congreso del Estado, enfatizó la necesidad de asegurar que estos recursos se utilicen con eficacia para proteger los ciclos productivos, ya que “serán afectadas miles de familias”.