Según datos de la Red de la Incidencia Política por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia (Redim) 2024, aproximadamente el 12% de los niños y adolescentes en Chihuahua, es decir, 129,500 menores, carecen de acceso a una alimentación nutritiva. Esta cifra representa una mejora con respecto al 2022, cuando el 16.3% de los menores en el estado enfrentaban esta misma situación.
A nivel nacional, la situación es aún más alarmante. La Redim destaca que “2 de cada 5 niñas, niños y adolescentes en México se encuentran en situación de pobreza o con carencia por acceso a servicios de salud”. Además, la discriminación también agrava la desigualdad en este sector, ya que “uno de cada 4 menores ha sido discriminado”.
La Redim señala que una nutrición adecuada y suficiente debe cumplir con ciertos estándares, tal como lo definen los organismos internacionales: “la ingesta de alimentos en relación con las necesidades dietéticas del organismo”, lo que implica un desayuno completo, al menos tres comidas al día y dos colaciones. Además, la nutrición equilibrada debe incluir una variedad de alimentos, tales como frutas, verduras, cereales, lácteos, carnes, pescado, leguminosas y agua simple natural.
A pesar de los avances, la Redim insiste en que los derechos de los menores, especialmente en lo que respecta a la alimentación, continúan siendo una “asignatura pendiente” debido a múltiples factores sociales y económicos. En este sentido, la Redim reitera que todos los niños y adolescentes tienen derecho “a una vida libre de violencia, desigualdad y discriminación”, lo que incluye, por supuesto, el derecho fundamental a la alimentación.