Equipo de Trump inicia preparativos para negociar acuerdo entre Ucrania y Rusia
El equipo del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, comenzará a trabajar junto con la administración saliente de Joe Biden para avanzar en un “acuerdo” que ponga fin al conflicto entre Ucrania y Rusia, según declaró Mike Waltz, futuro asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca.
Desde la victoria electoral de Trump el pasado 5 de noviembre, han surgido temores en Europa de que Estados Unidos pueda desentenderse del conflicto o forzar un acuerdo desfavorable para Kiev. Waltz aseguró que la prioridad del equipo de Trump es gestionar la escalada actual y sentar las bases para posibles negociaciones.
“El presidente Trump ha sido muy claro sobre la necesidad de poner fin a este conflicto. Lo que tenemos que discutir es quién estará en la mesa, si será un acuerdo, un armisticio, cómo conseguimos que ambas partes dialoguen y cuál será el marco para dicho acuerdo”, afirmó Waltz durante una entrevista con Fox News. También subrayó que trabajarán con la administración actual hasta la toma de posesión el 20 de enero, para luego continuar con sus propias estrategias.
Waltz, un exoficial de las fuerzas especiales, fue presentado por Trump como un “experto en amenazas como China, Rusia, Irán y el terrorismo mundial”. Según analistas, formará un equipo de enfoque agresivo junto a Marco Rubio, quien estará al frente de la diplomacia.
En tanto, el equipo de Trump ha criticado severamente la decisión de Biden de permitir ataques ucranianos en territorio ruso con misiles de largo alcance fabricados en Estados Unidos. Durante su campaña, Trump se mostró escéptico ante los miles de millones de dólares enviados por la administración Biden a Ucrania desde el inicio de la invasión rusa en 2022, prometiendo poner fin rápidamente a la guerra, aunque sin detallar sus métodos.
Waltz también abordó el tema de Medio Oriente, donde sugirió la necesidad de un “acuerdo” que fomente una estabilidad duradera en la región. Esta visión es consistente con la postura general de Trump de priorizar acuerdos que eviten conflictos prolongados.
