
Las autoridades de Washington informaron que al menos 28 cuerpos han sido recuperados del Río Potomac tras la colisión entre un avión comercial y un helicóptero militar. El jefe de Bomberos advirtió que no creen que haya sobrevivientes del accidente ocurrido la noche del 29 de enero.
El incidente involucró un Bombardier CRJ700 de PSA Airlines, filial de American Airlines, y un helicóptero Black Hawk Sikorsky H-60 del Ejército de Estados Unidos. Según reportes preliminares, la aeronave militar realizaba un vuelo de entrenamiento cuando ocurrió la colisión.
El avión, que transportaba 60 pasajeros y cuatro tripulantes, se dirigía desde Kansas al Aeropuerto Nacional Ronald Reagan cuando impactó con el helicóptero, donde viajaban tres personas. El choque provocó que ambas aeronaves cayeran al río, lo que llevó al cierre del aeropuerto y a una intensa movilización de equipos de rescate.
Cerca de 300 rescatistas trabajan en la zona para recuperar los cuerpos, enfrentando las bajas temperaturas del agua, lo que dificulta las labores. Las autoridades han señalado que en las próximas horas se darán a conocer más detalles sobre la posible causa del accidente y las responsabilidades correspondientes.
El presidente Donald Trump lamentó la tragedia y expresó su reconocimiento a los equipos de emergencia por su labor en la recuperación de víctimas.