
La presidenta Claudia Sheinbaum reafirmó que México es un país independiente y no permitirá injerencias extranjeras ni actos de sometimiento. “Cooperación sí, subordinación no; colaboración sí, sometimiento no. Nada de injerencismo ni intervencionismo; tampoco de racismo ni de clasismo”, aseguró en la ceremonia por el 108 aniversario de la Constitución.
Durante el evento en el Teatro de la República, recibió el respaldo de la clase política, con gritos de “¡mucha presidenta, mucha presidenta!”. En la ceremonia destacaron las ministras Lenia Batres, Loretta Ortiz y Yasmín Esquivel, mientras que la presidenta de la Suprema Corte, Norma Piña, no estuvo presente al no haber sido invitada.
Sheinbaum hizo un llamado a la defensa de la soberanía nacional, la democracia y los derechos del pueblo. “México tiene un pueblo valeroso que sabe estar siempre a la altura de los retos”, afirmó, al recordar la lucha histórica que ha forjado al país.
En su discurso, subrayó que la Constitución es el escudo de la nación y reiteró su compromiso con el pueblo. “Todo por el pueblo, todo con el pueblo. Nuestra razón de ser es servir al pueblo”, concluyó.