
Miles de argentinos tomaron las calles para exigir juicio y castigo contra los responsables de la última dictadura militar (1976-1983), al cumplirse 49 años del golpe de Estado que marcó una de las etapas más oscuras del país. Con la consigna “Madres de la Plaza, el pueblo las abraza”, la marcha por la Memoria, la Verdad y la Justicia reunió a organismos de derechos humanos, sindicatos, movimientos sociales y estudiantes en el centro de Buenos Aires.
Los manifestantes exigieron la desclasificación de archivos para esclarecer el destino de los 30 mil desaparecidos y la restitución de bebés sustraídos por los militares. Desde Abuelas de Plaza de Mayo, su presidenta, Estela de Carlotto, recordó que hasta la fecha se han recuperado 139 identidades y reiteró que el Estado debe garantizar la búsqueda de los nietos y nietas robados.
El gobierno de Javier Milei fue duramente señalado por su postura negacionista y por el desmantelamiento de instituciones clave como la Secretaría de Derechos Humanos y el Banco Nacional de Datos Genéticos. Entre los carteles y consignas, se escucharon protestas contra el presidente y su política de seguridad, que en semanas anteriores derivó en represión contra jubilados y periodistas.
A diferencia de otras ocasiones, la movilización transcurrió sin intervención policial. Sin embargo, en un mensaje en redes sociales, Milei difundió un video que minimiza los crímenes de la dictadura y equipara las violaciones a los derechos humanos con la lucha armada de grupos de izquierda. La narrativa del gobierno busca reforzar la teoría de los “dos demonios”, una visión ampliamente rechazada por los organismos de derechos humanos y la sociedad argentina, que sigue exigiendo justicia.