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Un Juez evita que se frene el tráfico de animales maltratados en el Mercado Sonora

Ulises Oswaldo Rivera González, Juez Cuarto de Distrito en materia Administrativa en la Ciudad de México, negó la suspensión definitiva de la venta de animales en el Mercado Sonora, ubicado en la Ciudad de México, argumentando que implicaría “la afectación económica” de quienes ejercen esa actividad, la cual está marcado por acusaciones de maltrato y tráfico de especies.

Ciudad de México, 13 de diciembre (SinEmbargo).- La venta de animales continuará de manera regular en el Mercado de Sonora, pese al maltrato que se ha documentado contra las especies que ahí se ofertan, así lo determinó Ulises Oswaldo Rivera González, Juez Cuarto de Distrito en materia Administrativa en la Ciudad de México.

Rivera González determinó con respecto al amparo indirecto 1547/2023 que siga operando el comercio de especies, que en la mayoría de las veces se encuentran en condiciones deplorables, bajo el argumento de que afecta la economía de quienes venden animales.

“Una medida de tal naturaleza [la suspensión definitiva de la venta de animales] implicaría, sin duda, una afectación al orden público y al interés social, por la afectación económica que evidentemente representaría para quienes para quienes estén ejerciendo esas actividades de comercio con apego a la normatividad vigente”, señala parte de la resolución que emitió el Juez difundida por la periodista Ruth Barrios Fuentes y organizaciones civiles.

“Afectación ésta que, en un juicio de ponderación, no encuentra del lado de la parte quejosa alguna apariencia de buen derecho con suficiente evidencia o magnitud como para superar el perjuicio que se ocasionaría al prohibirse de plano y sin juicio previo la comercialización de animales en el mercado mencionado”, se añade en el documento.

Las autoridades correspondientes habían retrasado en dos ocasiones la audiencia para resolver la problemática de maltrato animal que existe en el Mercado de Sonora, debido a que no habían hecho ninguna notificación a la Agencia de Atención Animal ni al departamento de Mercados, lo que estaba provocando que el juicio al respecto se mantuviera estancado, mientras que los animales continuaban en las mismas condiciones.

El 21 de octubre, la organización Va por sus Derechos dio a conocer que ganó algunos amparos con los que se buscaba contribuir a que se elimine la venta de animales en el Mercado de Sonora, ubicado en la Alcaldía Venustiano Carranza. Uno de estos recursos autorizaba que se realizarán inspecciones en ese lugar y otro era para que se notificara a los vendedores que esa práctica era ilegal.

Además, semanas antes, el 6 de octubre, el Juez Rivera González admitió un amparo que interpuso la misma organización, con el que se buscaba prohibir la venta de animales en el Mercado de Sonora, así como el rescate de las especies que se encuentran en dicho inmueble, con el que se ordenó una inspección a ese espacio comercial.

En una entrevista que Susana Ramírez Terrazas, directora Va por sus Derechos, concedió al medio digital Aristegui Noticias, ésta explicó que la compra-venta de animales dentro del Mercado Sonora “viola la Constitución Política” de la Ciudad de México, además de que las especies que ahí se comercializan están en condiciones de “maltrato y hacinamiento”.

El artículo 25 fracción XXI de la Ley de Protección Animal de la Ciudad de México sostiene que “está prohibido vender animales vivos en mercados públicos o en todos aquellos lugares que no cumplan los supuestos del artículo 28 de la presente Ley”, en el cual se agregó el artículo 28 Bis que apunta que “los establecimientos dedicados a la reproducción, selección, crianza o venta de animales de compañía, deberán cumplir las disposiciones que le sean aplicables”.

Entre las disposiciones para poder vender animales se encuentran contar con los requisitos y autorizaciones correspondientes a la legislación administrativa y mercantil; tener buenas condiciones sanitarias, adecuadas a las necesidades de los animales que alberguen; disponer de comida y agua.

Además de lugares para dormir, personal capacitado para el cuidado de los animales, así como servicio médico veterinario en el lugar; disponer de instalaciones adecuadas para evitar el contagio en los casos de enfermedad; y vender animales, registrados, esterilizados, desparasitados y libres de toda enfermedad, con los certificados correspondientes; por mencionar algunos.

No obstante, el Mercado de Sonora no cuenta con muchos de los requerimientos estipulados por la Ley de Protección Animal capitalina y, en noviembre del 2021, un incendio que inició en el área de cocina del Mercado de Sonora, lo puso en evidencia, ya que destapó las deplorables condiciones en las que se encontraban los animales silvestres y domésticos que yacían hacinados para su venta en varios de los locales de dicho lugar.

​​El 4 de noviembre del 2021 luego de que los Bomberos de la capital mexicana lograran extinguir el incendio del Mercado de Sonora, la Secretaria de Protección Civil Myriam Urzúa declaró que habían registrado “saldo blanco en el sentido que no tuvimos heridos, no hay ningún fallecido, incluso los animales que estaban en el lugar se encuentran en buen estado”.

Dicha declaración distaba mucho de la realidad, pues si bien los animales no se vieron afectados directamente por las llamas, la realidad es que a la gran mayoría se les podía ver en malas condiciones, por lo que en ese momento, la Alcaldesa de Morena, Evelyn Parra Álvarez, se comprometió a realizar un plan gradual para que los locatarios cambiaran de giro comercial, hasta el momento esta actividad no sólo persiste, ahora podrá ejercerse bajo el amparo de la ley.

Tras el incendio SinEmbargo se puso en contacto con el Licenciado José Luis Carranza, presidente y fundador del Frente Ciudadano Pro-Derecho Animal (Frecda), quien en 2021 promovió un juicio de amparo en contra de la omisión de las autoridades por lo que ocurre dentro de este lugar.

“Ese asunto apesta a corrupción porque realmente para resolver cada paso tienen que pasar por lo menos seis meses. Empezamos en agosto del 2018 y ahorita todavía estamos en ejecución del cumplimiento porque el Tribunal está dando muchas largas”, expresó Carranza.

“Ellos cuentan con cédulas de empadronamiento, muchas veces esas cédulas no están actualizadas, muchas de ellas no están refrendadas y es parte de la omisión, muchos de ellos empezaron a ejercer esa acción en 1952, que en base a ese reglamento tienen esos derechos porque surgieron esos puestos con esa finalidad”, denunció en ese momento.

“Pero si nos vamos al tema administrativo, el reglamento de mercados dice que la cédula del comerciante tiene que refrendarse cada año siempre y cuando mantengan las situaciones en iguales circunstancias que le dieron origen. Aquí técnicamente ya no están las circunstancias iguales”, añadió.

“En ese momento [tras el incendio] se hablaba de que estos animales pudieran ser dados a protectoras para buscarles un hogar, que fueran atendidos los que estaban en malas condiciones, no solamente por el incendio, eran animales que ya estaban en malas condiciones por estar ahí en el Mercado de Sonora”, expresó.

“Los locatarios le exigieron a las autoridades y ellos cobardemente regresaron estos animales. Lo que vendría siendo que la autoridad regresó los animales a los infractores”, expuso Berlanga.

Evelyn Parra Álvarez, alcaldesa en Venustiano Carranza, compartió el 26 de agosto de 2022 a El Universal que la venta de animales persiste en el Mercado de Sonora a pesar de que se ha buscado la posibilidad de que los locatarios dejen esta actividad y detalló que sólo 12 locales accedieron en ese momento a cambiar de giro comercial.

El licenciado Carranza alertó que, además de las deplorables condiciones en las que se encuentran los animales en el Mercado de Sonora, también representan un foco de infección pues se han encontrado gallinas con influenza aviar y la mayoría de los cachorros suelen estar contagiados parvovirus y moquillo.

El Mercado de Sonora ha ganado gran parte de su popularidad por la venta de animales no sólo para fines de compañía sino también para sacrificios en rituales de santería, culto de origen afrocubano en el que se realizan este tipo de ofrendas a las deidades, y brujería.

“El Mercado Sonora prolifera la brujería, la santería y el uso de animales en rituales, siendo que los rituales están prohibidos en la Ley de Protección Animal de la Ciudad de México”, explicó Carranza.

Lo anterior, está estipulado en fracción XIII del artículo 25 de la Ley de Protección Animal de la Ciudad de México, en la que se señala que “queda prohibido por cualquier motivo el uso de animales en la celebración de ritos y usos tradicionales que puedan afectar el bienestar animal”.

Crédito: SINEMBARGO

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