En una reciente entrevista con “Los Periodistas”, Pablo Gómez, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), expuso que Genaro García Luna, ex Secretario de Seguridad Pública en el gobierno de Felipe Calderón, utilizó fraudes para dispersar dinero en efectivo destinado a financiar campañas electorales del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en varios estados del país.
Gómez destacó: “Hay una dispersión muy interesante de dinero que fue a dar a ciertos estados para financiar campañas electorales.” Aunque las cantidades no son comparables a los grandes fraudes, se trató de dinero en efectivo que se comprobó a través de una empresa encargada de la distribución de efectivo. Gómez añadió: “El que le estaba dando la lana en ese momento era del PRI.”
Ayer, García Luna fue sentenciado a 38 años y seis meses de prisión en Brooklyn, Nueva York, por múltiples cargos relacionados con el narcotráfico. El Juez Brian Cogan le impuso una multa de 2 millones de dólares y, antes de la sentencia, comentó: “Quiero darle algo de luz al final del túnel.”
La Fiscalía solicitó que García Luna cumpla cadena perpetua, mientras que su defensa pidió un máximo de 20 años. En relación a sus problemas legales en México, Gómez mencionó que tiene dos asuntos pendientes vinculados a fraudes cometidos durante su gestión y después, en el sexenio de Enrique Peña Nieto.
“En México ha sido vinculado a proceso por una serie de fraudes que cometió durante el desempeño de su cargo.” Gómez indicó que el fraude al organismo de prisiones en México supera los 600 millones de dólares. Además, reveló: “Hay una trama corrupta que él organizó… Los cargos son por un fraude al organismo de prisiones.”
García Luna y sus cómplices, incluidos miembros de la familia Weinberg, fueron responsables de fraudes mediante contratos fraudulentos que desviaron fondos a diferentes partes del mundo, y Gómez resaltó que su esposa estaba involucrada en una de las empresas utilizadas para llevar a cabo estos delitos.
