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Tres periodistas mueren en bombardeo al sur de Líbano

Un ataque aéreo israelí en el sureste del Líbano acabó con la vida de tres periodistas que dormían en una casa de huéspedes durante la madrugada del viernes. Este bombardeo se considera uno de los ataques más mortíferos dirigidos a periodistas desde el inicio de las hostilidades en la frontera, hace un año.

La zona, hasta entonces libre de enfrentamientos, había sido elegida por medios de comunicación como base segura para cubrir el conflicto. Sin embargo, la región de Hasbaya, donde ocurrió el ataque, se convirtió en el epicentro de críticas y condenas de autoridades y organizaciones defensoras de la libertad de prensa.

Aya Majzoub, subdirectora de Amnistía Internacional para Oriente Medio y el Norte de África, señaló que los periodistas, como civiles, deben ser protegidos bajo el derecho internacional humanitario, y calificó de preocupante los ataques a instituciones civiles. Por su parte, Elsy Moufarrej, coordinadora del Sindicato de Prensa Alternativa en el Líbano, calificó el ataque como un intento de desalojar a los periodistas del sur del país para limitar la cobertura informativa.

El ministro libanés de Información, Ziad Makary, condenó el incidente, señalando que las víctimas estaban documentando lo que llamó “los crímenes” de Israel. Según Makary, 18 periodistas se encontraban en la zona, representando a siete medios de comunicación diferentes, lo que indicaría, según sus palabras, una acción premeditada.

El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ) reportó a principios de octubre que, en el último año, al menos 128 profesionales de medios de comunicación han perdido la vida en ataques en Gaza y Líbano, siendo la mayoría de ellos palestinos y casi todos en ataques atribuidos a las fuerzas israelíes. El asesinato de periodistas ha suscitado protestas a nivel internacional, con grupos de derechos de la prensa y expertos de Naciones Unidas exigiendo mayor protección para estos trabajadores, mientras Israel mantiene que no tiene como objetivo a los periodistas.

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