El pleno del Senado aprobó por unanimidad la reforma constitucional a los artículos 4 y 27 en materia de Bienestar, con 117 votos, que garantiza derechos esenciales a los grupos más vulnerables de México, incluyendo a adultos mayores, personas con discapacidad, campesinos, productores y pescadores.
Esta reforma, parte del paquete presentado el 5 de febrero por el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador, reduce la edad para recibir la pensión de adultos mayores de 68 a 65 años, reafirmando el compromiso del Estado con los derechos sociales y el acceso equitativo a recursos fundamentales.
Objetivos de la Reforma
La implementación de esta reforma busca blindar los programas sociales, asegurando continuidad y recursos suficientes para proteger el acceso a una vida digna y combatir la desigualdad social.
Beneficios Directos:
- Introducción de una pensión no contributiva para personas con discapacidad menores de 65 años.
- Servicios de rehabilitación priorizados para menores de 18 años.
- Recursos anuales suficientes para evitar recortes en las pensiones.
- Apoyo a campesinos, productores y pescadores con jornales seguros, fertilizantes gratuitos y precios de garantía para productos como maíz y frijol.
Debate y Acusaciones
A pesar del consenso, la sesión se tornó tensa debido a las acusaciones entre oficialismo y oposición sobre el uso político de los programas sociales. Legisladores de Morena presentaron un audio de Vicente Fox criticando estos programas, mientras que la oposición acusó a senadores de Morena, como Juan Carlos Loera y Alejandro Esquer, de utilizar estos recursos con fines electorales.
La oposición también mencionó el caso de corrupción en Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex), entidad encargada de garantizar el acceso a alimentos básicos. Varios funcionarios de Segalmex están siendo investigados por desvío de recursos, lo que ha generado preocupaciones sobre la transparencia en la gestión de fondos.
Posturas de Oficialismo y Oposición
El senador de Morena, Enrique Inzunza, calificó la reforma como un “paso gigantesco” hacia un Estado que garantice derechos sociales. Por su parte, la senadora Andrea Chávez, presidenta de la Comisión de Bienestar, destacó la importancia de este avance en políticas sociales.
Partidos como PAN, PRI y Movimiento Ciudadano respaldaron la reforma, pero hicieron hincapié en la necesidad de transparencia. La senadora panista María de Jesús Díaz Marmolejo exigió recursos sin corrupción, mientras que Luis Donaldo Colosio, de Movimiento Ciudadano, señaló que el éxito de la reforma dependerá de su implementación efectiva para combatir la pobreza.
La senadora Anabell Ávalos del PRI criticó la eliminación de programas como el Seguro Popular y Guarderías Infantiles, advirtiendo que los programas no deben convertirse en herramientas de clientelismo.
Al final de la sesión, el senador presidente de la Cámara alta, Gerardo Fernández Noroña, calificó el acto como “histórico e inédito” y ordenó que el dictamen sea remitido a las legislaturas estatales y de la Ciudad de México para su ratificación.
