El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, rechazó este miércoles las declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien había afirmado que su Administración “reclamará” el Canal de Panamá, asegurando que ya había comenzado a hacerlo.
Mulino calificó las palabras de Trump como “mentiras”, aclarando que el Canal de Panamá “no está en proceso de recuperación” por parte del gobierno estadounidense. En su mensaje en X, Mulino expresó: “Nuevamente miente el presidente Trump. El Canal de Panamá no está en proceso de recuperación… Rechazo a nombre de Panamá y de todos los panameños esta nueva afrenta a la verdad y a nuestra dignidad como Nación”.
El origen del conflicto se dio en un discurso de Trump ante el Congreso de EE.UU., el martes, donde afirmó: “El Canal de Panamá fue construido por estadounidenses para estadounidenses, no para otros, pero otros podrían usarlo. Pero ese acuerdo ha sido violado de forma severa. No se lo dimos a China, se lo dimos a Panamá, y lo vamos a recuperar”. Trump también hizo referencia a la venta de puertos en la zona del Canal a un consorcio encabezado por el fondo BlackRock, involucrando a la empresa hongkonesa CK Hutchison, que opera los puertos de Balboa y Cristóbal.
En respuesta, China calificó las afirmaciones de Trump como “completamente falsas”, refiriéndose a las acusaciones sobre el control chino del Canal de Panamá. Además, evitó pronunciarse sobre la reciente venta de los puertos mencionados.
El gobierno panameño ha rechazado reiteradamente cualquier acusación de injerencia extranjera en el Canal, insistiendo en que este sigue siendo “y seguirá siendo” de Panamá, tras su transferencia del control estadounidense en 1999. Mulino también destacó que los peajes del Canal, que se aplican a todos los buques sin distinción de bandera, son fijados por la Junta Directiva del Canal con la aprobación del Consejo de Gabinete, en base a los Tratados Torrijos-Carter de 1977.
El presidente de Panamá también subrayó que la ley prohíbe la modificación unilateral de estas tarifas, y que los buques de guerra, sin importar su nacionalidad, tienen una tarifa especial, mientras que los de EE.UU. cuentan con un paso expedito.
