Sinéad O’Connor, icónica cantante irlandesa de los 80 y 90, muere a los 56 años
La familia de la intérprete de Nothing Compares 2 U confirmó la noticia; el año pasado murió su hijo menor Shane a los 17 años luego de haber sido reportado como desaparecido por varios días.
La cantante irlandesa Sinéad O’Connor ha fallecido este miércoles a los 56 años, según ha adelantado el portal Irish Times.
La artista alcanzó la fama con la publicación del disco I Do Not Want What I Haven’t Got, editado en 1990. En este álbum se incluyó el tema más famoso de la artista, la canción Nothing Compares 2 U, compuesta por Prince, con la que la irlandesa consiguió varias nominaciones para los premios Grammy. En su extensa trayectoria profesional llegó a publicar hasta diez álbumes.
Nacida en Dublín en 1966, la cantante y compositora irlandesa dio sus primeros pasos en el mundo de la música en el grupo Tom Tom Macute hacia 1985 y, tras una breve estancia en dicha banda, decidió marcharse a Londres, donde conoció a los miembros de U2 y The Edge, y colaboró en la composición de la banda sonora de la película Captive. En 1987 grabó su primer álbum para la discográfica Chrysalis, The Lion and the Cobra, que consiguió una nominación para los premios Grammy.
Tras su éxito a principios de la década de los noventa, en 1992 lanzó su tercer álbum, Am I not your Girl?, una colección de versiones de jazz que, no obstante, no consiguió el éxito esperado. Puso también voz a la banda Sonora de la película en el nombre del padre, en colaboración con bono de U2.
En un comunicado, la familia de la artista ha confirmado la noticia. “Con gran tristeza anunciamos el fallecimiento de nuestra querida Sinéad. Su familia y amigos están devastados y han solicitado privacidad en este momento tan difícil”, han señalado.
Fue una inconformista de toda la vida. Se afeitó la cabeza en respuesta a que los ejecutivos discográficos la presionaron para que fuera convencionalmente glamorosa; pero sus posturas políticas y culturales y su vida privada problemática a menudo eclipsaron su música. Se peleó con Frank Sinatra por su negativa a permitir que tocaran el himno nacional estadounidense en uno de sus espectáculos y acusó a Prince de amenazarla físicamente.
En 1989 declaró su apoyo al Ejército Republicano Irlandés, declaración de la que se retractó un año después. Casi al mismo tiempo, se abstuvo de asistir a la ceremonia de los Grammy, diciendo que era demasiado comercial.
Sin embargo, el momento más polémico de O’Connor ocurrió el 3 de octubre de 1992, cuando la cantante fue la artista invitada en el programa cómico Saturday Night Live.
En aquella ocasión, la cantante interpretó una versión a capella del tema War de Bob Marley, como forma de protesta ante los abusos sexuales —sobre todo contra menores de edad— perpetrados por sacerdotes de la Iglesia católica.
Durante su performance, cambió deliberadamente la letra de la canción, la cual habla sobre racismo, para explícitamente denunciar el “abuso de menores”, además de repetir la palabra “niño” en distintas ocasiones.
No conforme con ello, momentos antes de terminar la canción, O’Connor mostró a cuadro una fotografía del entonces Papa Juan Pablo II y la rompió en vivo.
“¡Lucha contra el enemigo real!”, dijo al término de su interpretación y arrojó los pedazos de la imagen.
Dicho acontecimiento afectó terriblemente su carrera, pues Sinéad fue abucheada en numerosas ocasiones para evitar que cantara en escenarios; además de que hubo quemas y destrucciones públicas de sus discos, y las estaciones de radio se negaron a transmitir sus canciones.
Si bien años después ofreció una disculpa al Papa durante una entrevista con un semanario italiano, O’Connor nunca se arrepintió de sus acciones.
En 2017, causó preocupación por su salud mental luego de que publicara un video en su página de Facebook en el que revelaba que había querido suicidarse durante dos años.
La compositora de 50 años, que fue diagnosticada con trastorno bipolar, confesó entre lágrimas que se sentía sola desde que perdió la custodia de su hijo de 13 años.
“Sé que soy una entre millones y millones de personas en el mundo que sufren como lo hago yo, que no tienen necesariamente los recursos que yo tengo. Si fuera por mí, ya me habría ido. Porque llevo dos años caminando sola por la Tierra como castigo por estar mentalmente enferma. Estoy sola como castigo por tener una enfermedad mental y estar enfadada porque nadie cuida de mí, especialmente por tener tendencias suicidas”, dijo.
El video de 12 minutos publicado el 4 de agosto, fue grabado al interior de una habitación de un motel del estado de Nueva Jersey, lugar donde vivía en aquel momento. Afirmó en ese entonces que un médico la mantenía viva mientras continuaba su batalla contra su salud mental.
“Estoy sola. Y no hay nadie en mi vida, excepto mi médico, mi psiquiatra ―el hombre más dulce del mundo, que dice que soy una heroína― y eso es la única cosa que me mantiene viva en este momento, y es patético”, confesó.
Esa fue no fue la primera vez que Sinéad O’Connor dio a conocer sus deseos de suicidarse. En noviembre de 2015 dejó un mensaje en Facebook en el que afirmó que había tomado una dosis letal de un fármaco. La cantante también intentó suicidarse a los 33 años y a los 45.
Un año después, anunció que se convirtió al Islam, por lo que cambió su nombre a Shuhada’ Davitt.
La cantante de 51 años publicó varias selfies en los que aparece con hiyab, además de un video en el que canta el Azan o la llamada al rezo.
“Esto es para anunciar que estoy orgullosa de haberme convertido en musulmana. Esta es la conclusión natural de cualquier viaje de un teólogo inteligente. Todo estudio de las Escrituras conduce al Islam. Lo que convierte todas las demás Escrituras en redundantes”, tuiteó el 19 de octubre.
El 6 de enero de 2022, la cantante anunció la desaparición de su hijo Shane O’ Connor de 17 años, quien se encontraba bajo vigilancia en un centro médico por riesgo de suicidio. Había sido visto por última vez en Tallaght, al sur de Dublín.
Dos días después, la policía irlandesa lo encontró muerto en el área de Bray, en Wicklow. Anteriormente, Sinéad había acudido a las redes sociales para contar algunos detalles sobre la batalla interna que su hijo libraba. Allí, precisó que había sido hospitalizado después de dos intentos de suicidio.
Después de su muerte, la famosa cantante de 55 años compartió un mensaje donde afirmó que el fallecimiento de su hijo “no fue culpa de nadie más que mía”. Esa publicación causó alerta en las redes sociales y provocó que las autoridades acudieran en su ayuda, por lo que fue hospitalizada como medida preventiva.
“Lo siento. No debí haber dicho eso. Ahora estoy con la policía de camino al hospital. Lo siento, molesté a todos. Estoy perdida sin mi hijo y me odio a mí misma. El hospital ayudará un tiempo. Pero voy a encontrar a Shane”, escribió a través de Twitter.
Crédito: SINEMBARGO