El expresidente es arrestado al llegar al juzgado; se declara inocente de 4 cargos
El exmandatario republicano se declaró no culpable por los cargos de defraudar a EU; conspirar para obstruir un procedimiento oficial y la certificación de papeletas; y por atentar contra el derecho al voto.
El expresidente de Estados Unidos Donald Trump se declaró inocente el jueves de intentar anular los resultados de las elecciones presidenciales de 2020, en las que fue derrotado, respondiendo por primera vez a los cargos federales que lo acusan de orquestar un intento descarado y finalmente fallido de bloquear la transferencia pacífica del poder presidencial.
Trump compareció ante un Juez de primera instancia en un Tribunal federal de Washington dos días después de ser acusado de cuatro delitos graves por el Fiscal Especial del Departamento de Justicia, Jack Smith. Los cargos lo acusan de intentar subvertir la voluntad de los votantes y de tratar de anular su derrota electoral en los días previos al 6 de enero de 2021, cuando sus partidarios irrumpieron en el Capitolio federal en un violento enfrentamiento con las fuerzas del orden.
Trump, el favorito en las primarias presidenciales republicanas de 2024, enfrenta cargos que incluyen conspiración para defraudar a Estados Unidos y obstruir la certificación por el Congreso de la victoria de Joe Biden. Su comparecencia del jueves, y el resto del proceso judicial, se desarrollará en un juzgado situado cerca del Capitolio y en un edificio en el que han sido acusados más de mil de los insurrectos del Capitolio.
El propio Smith estuvo en la sala y se sentó en primera fila detrás de los fiscales que llevan el caso. También se vio entrar en el tribunal a tres agentes de policía que defendieron el Capitolio ese día.
Donald Trump fue detenido este jueves a su llegada a un tribunal de Washington en el marco de la investigación abierta en su contra por el Fiscal Jack Smith sobre su intento de revertir el resultado de las elecciones de 2020.
El magnate ha viajado hasta el Juzgado Barrett Prettyman en su vehículo desde el aeropuerto de Washington acompañado de varios de sus asesores de campaña electoral: Susie Wiles, Chris LaCivita, Jason Miller y Steven Cheung. En la comitiva también estaba presente la abogada Alina Habba.
El primer cargo conlleva una pena máxima de cinco años, mientras que los dos cargos de conspiración e intento de obstruir la certificación de las papeletas en las urnas implican, cada uno, un monto máximo de 20 años. Finalmente, por atentar contra el derecho a voto, Trump podría recibir una sentencia máximo de 10 años.
Trump estará representado durante el proceso por su abogado, Todd Blanche, quien ya le asistió en el caso de los documentos clasificados, por el que se declaró no culpable a mediados de junio, según ha informado la cadena NBC News.
Los fiscales defienden que Trump manipuló a los manifestantes al hacerles creer que el entonces Vicepresidente Mike Pence podía cambiar los resultados de las elecciones, lo que finalmente derivó en el asalto al Capitolio del 6 de enero.
El expresidente ya fue imputado en marzo en el marco de la investigación en su contra por el presunto pago de un soborno a la actriz de cine porno Stephanie Clifford, conocida como Stormy Daniels, y también se enfrenta a 39 cargos por el caso de los documentos clasificados encontrados en su mansión de Mar-a-Lago, en Florida
¿POR QUÉ TRUMP ES IMPUTADO?
El pasado 1 de agosto, un gran jurado de Washington imputó con cuatro cargos federales al expresidente Donald Trump dentro del marco de la investigación abierta en su contra por intentar revocar el resultado de las elecciones de 2020, que dieron la victoria a Joe Biden.
En concreto, Trump se enfrenta a un cargo de conspiración “mediante el uso de la deshonestidad, el fraude y el engaño para obstruir el proceso nacional de recopilación, conteo y certificación de los resultados de las elecciones presidenciales”, que conlleva una sentencia máxima de cinco años de prisión.
El expresidente se enfrenta a una sentencia máxima de 20 años de prisión por conspirar para impedir que el Congreso certifique los resultados recogidos por las urnas y a una sentencia de diez años de prisión por conspirar contra el derecho al voto.
Finalmente, el cuarto cargo conlleva una sentencia de 20 años de prisión por intento de obstruir la certificación de las papeletas. El caso ha sido asignado a la Jueza de Distrito Tanya Chutkan, nombrada por el expresidente Barack Obama, y que es conocida por dar las sentencias más duras en los casos del asalto al Capitolio.
“Este no es sino otro capítulo corrupto en el patético intento de la familia criminal de Biden y su títere Departamento de Justicia para interferir en las elecciones presidenciales de 2024”, ha reaccionado en un comunicado el equipo de su campaña electoral en la red social Truth Social.
Los fiscales federales han asegurado en un comunicado recogido por CNN que el expresidente “estaba decidido a permanecer en el poder” tras su derrota en las elecciones de 2020 y que estuvo más de dos meses “difundiendo mentiras sobre fraude electoral” sabiendo que dichas afirmaciones “eran falsas”.
Además, han añadido esas falsas declaraciones crearon “un intenso ambiente de desconfianza e ira, y erosionaron la confianza pública en la administración de las elecciones”.
La acusación ha afirmado que Trump manipuló a los manifestantes al hacerles creer que el entonces Vicepresidente Mike Pence podría cambiar los resultados de las elecciones, por lo que acabaron “asaltando de forma violenta” el Capitolio tras conocerse la negativa de Pence.
Otra de las pruebas en su contra es una llamada del entonces asesor de la Casa Blanca Pat Cipollone, en la que le pidió retirar sus palabras y que permitiese al Congreso la ratificación de los resultados, aunque el expresidente acabó negándose.
LA FISCALÍA BUSCA UN JUICIO RÁPIDO; INFORMA DE SEIS CÓMPLICES
Smith, por su parte, ha declarado en una rueda de prensa que la Fiscalía buscará un juicio rápido para que “las evidencias puedan ser probadas en el tribunal y juzgadas por un jurado de ciudadanos”.
“El ataque a la capital de nuestra nación […] fue un ataque sin precedentes a la democracia estadounidense […]. Fue alimentado por mentiras, mentiras del acusado, dirigidas a obstruir una función fundamental del Gobierno de Estados Unidos: el proceso de recopilar, contar y certificar los resultados electorales”, ha añadido el Fiscal especial.
Asimismo, el Fiscal General de Estados Unidos, Merrick Garland, ha proclamado que los empleados del Departamento de Justicia han participado en “la investigación más grande de la historia del país”, según ha recogido la cadena NBC News.
Por otro lado, el informe de la Fiscalía habla de hasta seis cómplices de Trump y, aunque no ha publicado sus nombres debido a que no están imputados, una investigación de CNN ha revelado los nombres de cinco de ellos.
Entre los colaboradores se encuentran los exabogados del expresidente Rudy Giuliani, John Eastman y Sidney Powell, el exfuncionario del Departamento de Justicia Jeffrey Clark, y Kenneth Chesebro, abogado favorable a Trump.
El sexto se trata de “un asesor político que ayudó a implementar el plan para presentar listas fraudulentas de electores presidenciales y obstruir el proceso de certificación”.
Trump, que deberá comparecer en el juzgado el próximo jueves, ya fue imputado en marzo en el marco de la investigación en su contra por el presunto pago de un soborno a la actriz de cine porno Stephanie Clifford, conocida como Stormy Daniels, y también se enfrenta a 40 cargos por el caso de los documentos clasificados.
POLÍTICOS REACCIONAN
El Presidente de la Cámara de los Representantes de Estados Unidos, Kevin McCarthy, ha asegurado que el Departamento de Justicia está intentando distraer a la población de las “recientes” noticias sobre Hunter Biden, hijo del Presidente del país, Joe Biden, que supuestamente habría recibido dinero de China.
Así, McCarthy ha denunciado que el Departamento de Justicia le dio una “amplia inmunidad en secreto” y que el propio Presidente habló con los socios comerciales de Hunter más de 20 veces, contradiciendo así “sus propias declaraciones”.
“Y apenas ayer, una nueva encuesta mostró que el expresidente Trump es, sin duda, el principal oponente político de Biden. Todos en Estados Unidos podían ver lo que vendría después: el intento del Departamento de Justicia de distraer la atención de las noticias y atacar al principal candidato a la nominación republicana, el expresidente Trump”, ha publicado McCarthy en la red social X, antes conocida como Twitter.
“Los republicanos de la Cámara seguiremos destapando la verdad sobre la Administración Biden y el sistema de dos niveles”, ha añadido.
Tanto el líder de la mayoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, como el líder de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Hakeem Jeffries, han calificado esta tercera imputación de Trump como “la más seria y con más consecuencias hasta el momento”.
El portavoz de la Casa Blanca para supervisión e investigaciones, Ian Sams, se ha negado a dar declaraciones al respecto y ha remitido al Departamento de Justicia.
Crédito: SINEMBARGO